Esta es una receta sencilla para preparar masa quebrada, que nos va a servir como base para tartaletas, quichés y otras recetas.
No es una receta propiamente italiana pero si se utiliza para muchas recetas italianas, es por eso que me ha parecido importante dejar un apunte de cómo preparar una masa quebrada fácil y rica :)
Ingredientes:
No es una receta propiamente italiana pero si se utiliza para muchas recetas italianas, es por eso que me ha parecido importante dejar un apunte de cómo preparar una masa quebrada fácil y rica :)
Ingredientes:
- 200g de harina de repostería
- 100g de mantequilla muy fría cortada en daditos
- 7-8 cucharadas de agua muy fría
- Una pizca de sal
Receta :
El tiempo de horneado va a variar mucho en función del tipo de receta que queramos hacer. Muchas veces el relleno que utilicemos necesita que lo horneemos con la masa, por eso meteremos la masa unos minutos primero y posteriormente terminará de hacerse con el resto de ingredientes.
Si lo que queremos es preparar una masa sola para rellenarla después sin utilizar más horno, tenemos que hornearla a 190 grados con calor arriba y abajo hasta que nos quede dorada y lista para rellenar.
Espero que os guste y os animeis a hacerla ;)
Yo utilizo esta masa para preparar quichés y alguna que otra tartaleta, si os apetece preparar una quiché buenísima, os recomiendo que probéis la quiché de queso gorgonzola y puerros. :)
- Lo primero que tenemos que hacer es tamizar la harina un par de veces.
- Una vez que la tengamos lista añadimos los daditos de mantequilla.
- Mezclamos, a mano o con unas varillas eléctricas la harina y la mantequilla hasta que quede una mezcla arenosa.
- Añadimos el agua muy fría y empezamos a amasar, podemos hacerlo a mano o a máquina. Yo prefiero echa un 80% de la cantidad que tenemos preparada para la receta e ir añadiendo el 20% restante cuando la masa lo necesita (os vais a dar cuenta porque si tenéis poca agua no podréis amasar todo el preparado que tenéis).
- Una vez que la tengamos lista la dejamos reposar bien tapada al menos unos 30 minutos en frío. A mi me gusta aplastarla y cubrirla con un papel film, y suelo dejarla una hora metida en la nevera.
- Por último la estiramos con un rodillo y la colocamos sobre el molde que queramos.
- Antes de hornearla tenemos que píncharla con un tenedor y ponle peso encima con alguna legumbre (como garbanzos) para que no se formen burbujas y se infle, necesitamos que nos quede una masa fina.
El tiempo de horneado va a variar mucho en función del tipo de receta que queramos hacer. Muchas veces el relleno que utilicemos necesita que lo horneemos con la masa, por eso meteremos la masa unos minutos primero y posteriormente terminará de hacerse con el resto de ingredientes.
Si lo que queremos es preparar una masa sola para rellenarla después sin utilizar más horno, tenemos que hornearla a 190 grados con calor arriba y abajo hasta que nos quede dorada y lista para rellenar.
Espero que os guste y os animeis a hacerla ;)
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Yo utilizo esta masa para preparar quichés y alguna que otra tartaleta, si os apetece preparar una quiché buenísima, os recomiendo que probéis la quiché de queso gorgonzola y puerros. :)
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